Venus en Virgo, YO deseo vs YO pienso

Venus es el planeta del deseo, del valor y simboliza la búsqueda de la armonía a través de las relaciones, del amor o de las artes. En la Carta Natal representa las cosas que nos gustan, lo que nos atrae y nuestro deseo de relacionarnos personal y socialmente. Venus se asocia también a la sexualidad y al impulso femenino. El signo en el que se encuentra Venus en la Carta Natal indica cómo nos relacionamos con los demás, cómo amamos y queremos ser amados, qué cosas nos gustan y nuestra escala de valores.

En Virgo, Venus, no disfruta su andar dado que es un signo regido por Mercurio, planeta racional y mental. Aquí es donde se plantea el Yo deseo vs. Yo pienso.

Venus, en lugar de sentir, se volverá pensativa por lo que se vuelve detallista, perfeccionista y critica de sí misma y de los demás. Venus viene de Leo donde tuvo que haber trabajado en sus talentos y el valor de sí misma, por lo que esta es una prueba de que tan bien aprendimos las lecciones de valor las últimas semanas.

El ingreso de Venus por el signo de Virgo se da con dos GRANDES TRINOS: agua y tierra. Ambos, en simultáneo, son una excelente combinación para este tránsito que favorece la fertilización en todo sentido.

Lo mas claro es la relación con la naturaleza. Venus fertiliza la tierra y vigoriza todo lo que tiene que ver con ella (siembras y/o cosechas). En este sentido, también, es un tiempo propicio para mejorar nuestra salud, mediante la buena alimentación, el ejercicio físico y la vida sana. Se favorecen las citas por controles médicos, el cambio de hábitos y rutinas diarias, la inclusión de dietas détox o el inicio de actividades terapéuticas que tengan que ver con la salud psicológica o espiritual.

En cuestiones del amor, cada vez que Venus llega a Virgo, es el momento propicio para desmenuzar qué nos motiva en una relación de pareja y cómo estamos internamente para relacionarnos de manera madura y saludable con otra persona. Si estamos comprometidos, es bueno ver qué expectativas estamos poniendo en una relación o hablar claramente con nuestra pareja sobre cuál es la finalidad o la siguiente etapa de la relación.

Con este tránsito aparece la disyuntiva ¨lo que pienso, es lo que deseo? ¨ Este cuestionamiento es necesario para una plenitud afectiva, responsable y madura que se habrá de manifestar cuando Venus llegue a Libra, signo que rige y donde se domicilia.

Aprovechemos el transito de Venus en Virgo para auto reflexionar sobre las bases que proyectamos en una relación seria sin dejar de lado el bienestar físico, emocional y espiritual.